Si te sorprende mi distancia diminuta, a segundos de tu - sueño profundo -, aclaro que es porque escribir, más allá de una necesidad emocional o intelectual, es un - obrar permanente -. La escritura es mi paréntesis, mi rompimiento de tensión. Aquí hablo, pido a la nada, señalo o comunico. Estás en mí cuando lo hago, conservando nuestra independencia, parcial y necesaria. No es contra ninguno de los dos, es contra la ronda que hace la muerte en mi cabeza.
No hay comentarios:
Publicar un comentario