miércoles, 29 de septiembre de 2021

después hablamos del contrato, linda, tráeme el tecito

Gerencias de mujeres de sonrisa ágil
mujeres enternecidas
Y enternecedoras;
Todo le cuelga a este relave;
las jibias y sus tentáculos hechos de sal negra negra como las playas que también cuelgan
Y las dunas
se estii i i iiran
como un chicle arenoso
y se caen encima
de  zorros y ancianos que por cada tocida la empresa les regala un souvenir con una foto de cuándo eran jóvenes canarios que no tocían que cantaban boleros
Y podían golpear
con jovial ímpetu
a mujeres
y maricones
Y ahora todo
Está así 
Colgando
Despellejándose como esa perra sarnosa
que merodea 
el hospital nuevo el estadio nuevo el cementerio y sus nuevas tumbas
Y a la final eso es lo que va creciendo
cámaras camillas pelotas de fútbol tumores 
jeepetas hoteles condominios 
un matadero arropado de colibríes pintados por todas partes 
Y ahí va la
perra
sarnosa
le falta un pedazo
cada vez se va haciendo más chica más minúscula más asquerosa
es pequeñísima
una ínfima célula cancerígena
que camina sostenida
en pedacitos de hueso y pelo y carbón
Uno que otro jote le sigue los pasos
Y no sé cómo si ese cielo es una taza de aguas servidas tan extraño tan podrido que no sé cómo 
se puede volar
si allá arriba hay tanta mierda
tanta mierda como la que dicen las gerentes de flequillo noventero porque aquí no es necesaria todavia la moda Yarur
Aquí la patrona viene en pantuflas si quiere porque para qué se va a poner
Sus aros de piedra preciosa
Su maquillaje perlado
Ese trajecito de tonos marinos si va a estar un puro día
un puro chile tu cielo azulado
una pura firma
apurada
agitada 
saboreando el billullo y preguntándose dónde lo va a invertir y a qué nana contratará si peruana o venezolana que la crisis migratoria nos
pone a todos nerviosos
sobretodo a las mujeres como una
que tiene que escoger entre
tantas
indiecitas
para que me haga el té
y me crie
el futuro.

martes, 28 de septiembre de 2021

Trabajar en qué y porqué y cómo. Explanadas terribles; horribles sueños manifestándose vivos; movedizos como garras que abren la tierra y te desarman. Prefiero eso, la muerte en mis pesadillas
la caída
lo vertigonoso del último segundo
Aferro las manos, una en cada paréntesis
Me desuno
fragmento lo que he nombrado
inúltilmente 
como cuerpo.

La pluma cae suave
Y lánguida
Y eso
no impide el acontecimiento: su caída.
Me pregunto
Cómo es que
Aún hay pájaros
En esta jaula de hierro.

La gente aquí tiene ritos
Uno de ellos
Es
Nunca 
Prender
Fuego. 
Y si
Por algún 
Inaceptable motivo
La brasa arde sobre la ciudad
Será que alguien no habrá asumido el protocolo.
La piromancia está prohibida en este circo.

Las fichas
tienen próceres adjuntos
Próceres del Imperio 
De la causa común que es la causa del futuro; yo quiero quedarme
Me exijo quedarme con mis sueños trizados
En mi penumbra agreste; solitaria. Es la soledad una criatura impresionante; acechada; relegada al mundo de las cosas con las que es mejor no toparse. Así es esta costra; la quimera de occidente: erige claustros y libertades, produce el centro y la orilla. 

No sé si aguante otra primavera; otros estornudos; si pueden sostenerse en y sobre mí otras cosas cotidianas. Necesito el exabrupto, los agitamientos, la falla de las cosas calculadas. Necesito que esta vez florezca 
una muerte inesperada, retorcida, absoluta.
Cómo la siembro, cómo 
abandono
este archipiélago
                      de paz. 

 Escribo cosas inútiles, negables para mí misma y no sé cuál es la diferencia entre la virtud y el defecto; la noción de lo verdaderamente p...